Si hay una palabra conocida en la medicina estética, esa es “lifting”. Este método era generalmente quirúrgico, si bien cada vez han surgido métodos de rejuvenecimiento facial igual de efectivos pero mucho menos invasivos. Hoy os hablamos sobre ello y sus beneficios.
¿Qué es un lifting facial?
Se trata de una intervención estética que se realiza con el objetivo de mejorar la apariencia de la piel y combatir los signos del envejecimiento. Esta técnica consiste en estirar (lift significa elevar) la piel y los tejidos subyacentes para mejorar la apariencia de las líneas de expresión, arrugas y flacidez facial.
¿Cómo se lleva a cabo un lifting?
Tradicionalmente se ha efectuado mediante cirugía, y requiere la utilización de anestesia general o local. El procedimiento consiste en efectuar una serie de incisiones detrás de la línea del cabello y alrededor de las orejas para acceder a las capas más profundas de la piel y los tejidos faciales. Una vez expuestos, se estiran y reajustan los músculos y la piel para conseguir un aspecto más joven y rejuvenecido.
Sin embargo, en los últimos años han surgido técnicas menos invasivas para llevarlo a cabo, como los hilos tensores.
Hilos tensores para el lifting facial
Estos hilos, fabricados con materiales biocompatibles, se insertan en la piel a través de pequeñas incisiones y se usan para levantar y tensar la piel.
Una vez que los hilos están en su lugar, se estiran para tensar la piel, lo que produce una apariencia más firme y joven. El procedimiento es mucho menos invasivo que el método tradicional, y se puede proceder bajo anestesia local en una clínica o consultorio médico.
Beneficios y ventajas del lifting sin cirugía
Una de las mayores ventajas del empleo de hilos tensores es que no requieren tiempo de recuperación prolongado, ya que se trata de una intervención mínimamente invasiva. Además, los resultados son inmediatos y pueden durar entre 6 y 18 meses, dependiendo de la técnica empleada y la calidad de los hilos empleados.
Otra ventaja es que se pueden usar en cualquier parte del cuerpo donde se necesite una elevación de la piel y un aumento de la firmeza. Además, se pueden emplear para mejorar la apariencia de la piel en áreas problemáticas como el cuello, la mandíbula y los pómulos.
Se trata de una alternativa menos invasiva, lo que significa que se pueden llevar a cabo en pacientes que no desean someterse a cirugía o que no son candidatos ideales para ella.
Asimismo, ofrecen resultados más sutiles y naturales, lo que significa que los pacientes pueden disfrutar de una apariencia más joven y fresca sin tener que preocuparse por parecer “exagerados” o “artificiales”.
Finalmente, cabe destacar que los hilos tensores pueden ser realizados en combinación con otras técnicas estéticas, como rellenos faciales, para lograr un aspecto más completo y equilibrado.
Si lo estáis considerando, es crucial que habléis con un cirujano estético experimentado para determinar cuál es la mejor opción.
Si deseáis saber más o realizaros un lifting sin cirugía, no dudéis en poneros en contacto con nosotros sin compromiso. ¡Os ayudaremos!