Hilos tensores: Funcionamiento y resultados

En otras ocasiones hemos hablado de procedimientos de rejuvenecimiento facial como la radiofrecuencia fraccionada, el láser, los rellenos dérmicos y Radiesse®. Otro método que cada vez está ganando más popularidad y adeptos son los hilos tensores.

Hoy os hablamos sobre en qué consisten, cómo funcionan y sus aplicaciones y beneficios.

¿Qué son los hilos tensores?

Se trata de una técnica mínimamente invasiva que se utiliza para tratar los signos del envejecimiento en la piel, especialmente en la cara y el cuello. Estos hilos están hechos de materiales biocompatibles y se colocan debajo de la piel para levantar y tensar la piel, lo que da como resultado un aspecto más joven y firme. 

¿Cómo son los hilos tensores?

Se componen de materiales biodegradables, como el ácido poliláctico, el ácido hialurónico y la polidioxanona (PDO). Estos materiales son seguros para el cuerpo y se utilizan en otros procedimientos médicos y estéticos. Están diseñados para absorberse naturalmente en el cuerpo con el tiempo.

¿Cómo se lleva a cabo el procedimiento de los hilos tensores?

La aplicación se lleva a cabo por un médico especialista en estética facial. Primero, se realiza una evaluación de la piel y se determina el número y la ubicación de los hilos que se necesitan. Se marca la zona de aplicación y se aplica anestesia local para minimizar las molestias durante el procedimiento.

Una vez que el área está adormecida, se inserta el hilo tensor debajo de la piel con la ayuda de una aguja o una cánula. Una vez que se coloca el hilo en la posición deseada, se tensa para levantar la piel y darle una apariencia más joven y firme. Los hilos se sujetan en su lugar con pequeñas anclas para que no se muevan y se fijan en la piel.

Beneficios de los hilos tensores

Tienen múltiples beneficios, como el rejuvenecimiento facial sin cirugía y con un tiempo de recuperación más rápido que las técnicas quirúrgicas. También son menos invasivos que otros procedimientos estéticos, lo que reduce el riesgo de complicaciones.

Además, son efectivos para tratar varias áreas de la cara y el cuello, como las mejillas, la mandíbula, el cuello y las cejas. También pueden mejorar la textura y la calidad de la piel en general, lo que hace que la piel parezca más joven y fresca.

Se trata de una opción adecuada para aquellos que desean un cambio sutil en su apariencia sin someterse a una cirugía facial completa. Pueden ser una buena opción para aquellos que no son candidatos para una cirugía debido a problemas de salud o por razones personales.

Sin embargo, no son adecuados para todas las personas. Aquellos que tienen piel muy delgada o flácida pueden no ser candidatos para esta técnica. También puede no ser adecuado para aquellos que tienen un gran exceso de piel o que requieren una corrección mayor en su apariencia facial. En estos casos, existen otras técnicas de rejuvenecimiento facial efectivas y también mínimamente invasivas.

Si estáis interesados en saber más o realizaros un tratamiento con hilos tensores, no dudéis en poneros en contacto con nosotros sin compromiso. ¡Os ayudaremos!

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